Hoy en día el comercio electrónico tiene muchas ventajas frente al comercio tradicional, sin embargo también han existido diversos problemas, tales como los fraudes. El contra cargo y el abuso del cliente es un obstáculo importante en esta área con una incidencia de entre el 1 y 2% en América Latina.
De acuerdo a la Condusef, tan solo en el primer trimestre de 2021 se registraron 628,132 contra cargos en operaciones con tarjeta de débito en México, lo que representó más de 15 mdd (323 millones de pesos) que tuvieron que absorber los comercios en línea.
Esto no quiere decir que los fraudes en este sector comercial sean irremediables; sino que con las herramientas y el conocimiento necesario, las posibilidades de ser víctimas de abuso del cliente disminuyen considerablemente.
El proceso del fraude
Existen dos tipos de perpetradores del fraude en el comercio en línea: los expertos y los clientes abusivos.
El robo de información financiera ya sea por el descuido de los usuarios al caer en tácticas como el phishing o por las brechas de seguridad en las plataformas en línea, ha dado pie a que los cibercriminales tengan acceso a los nombres de los titulares de las tarjetas, sus números de cuenta y otra información personal.
Esta información se vende a terceros, quienes aprovechan los datos sensibles para robar la identidad de los usuarios y realizar cargos con sus tarjetas bancarias:
- Primero realizan compras pequeñas que pasen desapercibidas por los verdaderos dueños de las tarjetas.
- De ser exitoso se realizan cargos más agresivos, mismos que probablemente serán reportados por los clientes legítimos como cargos no reconocidos.
- Al cancelar el pago de un producto o servicio, el comercio es quien sufre la pérdida de la venta que se había generado.
Por otro lado están los clientes abusivos, que aunque no se dedican al fraude de forma profesional, sí engañan a los comerciantes con el objetivo de que les regresen su dinero. Es decir, tras pedir un producto en línea y recibirlo en su domicilio, lo declaran como perdido y obtienen su reembolso en un periodo determinado.
Las personas que perpetúan estas acciones saben que los grandes comercios suelen tener medidas de protección antifraude, sin embargo al tener un mayor volumen de órdenes de compra facilita que ciertos golpes pasen desapercibidos, sobre todo en épocas altas de venta como el HOT SALE o el Buen Fin.
Por otro lado están los comercios en línea más nuevos, que no suelen tener las herramientas ni la preparación necesaria para detectar fraudes y como aceptan órdenes de compra sin discriminación para aumentar sus ganancias, la situación se convierte en una gran oportunidad para los cibercriminales y los clientes abusivos.
¿Puedo evitar completamente este problema en mi negocio?
No por completo, pero puedes disminuirlo si adoptas las estrategias de los grandes vendedores en línea, los cuales se apoyan en tecnologías innovadoras antifraude como la Solución de Protección contra Fraude de Signifyd que utiliza Big Data y Machine Learning para determinar con mayor velocidad si los clientes son legítimos o si tu negocio podría ser víctima de contracargos. La mejor defensa en una buena ofensiva.
Estas herramientas facilitan también a los negocios a confiar en ventas que, sin la información correcta y el contexto necesario, podrían parecer ilegítimas. Como resultado, los clientes no deben esperar mucho tiempo a que sus transacciones sean aprobadas. Y lo más importante, entre los comercios han adoptado un enfoque innovador para la protección contra el fraude, con un aumento de ingresos promedio de entre 4% y 10%.